¿Llegará el USB-C definitivamente a los dispositivos iOS?

Llevamos bastante tiempo hablando del USB-C, un sistema de transferencia de datos que Apple misma ha querido popularizar, eso si, sin sacarlos de los dispositivos portátiles de escritorio. La compañía de Cupertino sigue mostrándose reacia a añadir este tipo de conexión en sus dispositivos móviles. El motivo, si conoces desde hace un tiempo la compañía de Cupertino te puedes hacer una idea. Sería abrir por completo el sistema a la transferencia de archivos y al acceso físico sin casi ningún tipo de control, por no hablar de los accesorios sobre los que perdería el control absoluto. Sin embargo, el USB-C tiene muchas características que quizás Apple no puede obviar. Por eso nos preguntamos: ¿Llegará el USB-C definitivamente a los dispositivos iOS?, vamos a sopesar los puntos a favor y en contra.

Así pues, vamos a ver cuáles son las razones que Apple podría esgrimir, tanto si decide añadir la conexión USB-C como si decide seguir apoyando al cable Lightning como el único acceso físico a los dispositivos iOS.

Motivos a favor del Lightning

• El cable Lightning llegó antes: En 2012 se lanzaba el iPhone 5 y con él llegaba la conexión Lightning, siete veces más rápido que el anterior. Como principal baza, no tenía conexión única, se podía conectar de cualquier lado, plantando cara al microUSB y su posición única.
• Permite emitir audio y vídeo, aunque no en la misma calidad que lo hace el USB-C, los EarPods Lightning son un ejemplo.
• Es una medida de seguridad. Gracias a este cable, Apple se asegura que no se van a utilizar accesorios falsos, perjudiciales para el dispositivo, y sobre todo, acceso físico para hackear el dispositivo iOS.
• Apple perdería el control sobre los accesorios, esto quiere decir que nos sería casi imposible a los usuarios determinar cuáles de los mismos son de fabricación genuina o no. Bajando mucho la calidad de los materiales, y perdiéndose así el sentido de la certificación MFi.

Motivos a favor del USB-C

El USB-C tiene incluso el apoyo de Apple, y es que llegaba el MacBook en su primera y renovada edición con una única conexión de datos, y esa era el USB-C, ya que además de transferir imagen y datos puros, podemos cargar el dispositivo a través de él de forma correcta, asesinando fríamente una fantástica conexión como el MagicSafe. El golpe de gracia lo recibía el MacBook Pro a finales del pasado año, otro dispositivo que cuenta únicamente con conexiones USB-C, diciéndole adiós a entradas tan populares y necesarias como lo son el HDMI y el lector de tarjetas SD. En definitiva, un adiós anunciado pero que quizás se adelantó. Sin embargo, en el panorama iOS todo apunta en dirección contraria, Apple se resiste, el iPhone 7  no incluía USB-C, y todo apunta a que el Galaxy S8 de Samsung si que lo hará ¿Qué tiene de bueno el USB-C en el iPhone?

• Podemos cargar el iPhone desde cualquier lugar. Y es que el USB-C una vez que esté popularizado nos permitirá cargar el iPhone en casa de nuestros amigos y amigas que usen dispositivos Android, por ejemplo, algo bastante duro para los usuarios de iOS que han estado siempre supeditados a sus propios cables.
• Abaratará los costes de los cables. El Lightning de calidad es caro, difícilmente te vas a hacer por uno decente y MFi por debajo de los seis euros. El USB-C tiene una fabricación más generalizada y barata, incluso en marcas reconocidas.
• El USB-C permite emitir audio y video en alta definición.
• Los televisores y monitores del futuro estarán adaptados al USB-C como una conexión de entrada y salida del contenido audiovisual, lo que nos permitiría conectar el iPhone sin intermediarios.