Los nuevos iPhone X, XS, XS Max y XR tienen un diseño en común en el que destaca, sobre todo, el notch, el saliente en la pantalla que tanto a dado de qué hablar durante 2018.
Por supuesto, es un saliente con motivos, ya que se necesita parte del frontal del iPhone para incluir sensores de luz, proximidad, la cámara, altavoces, etc.
Sin embargo, tanto Apple como otras compañías buscan el poder ofrecer un móvil que sea todo pantalla. Sin marcos y sin notch.
Pues parece ser que AMS, el fabricante de algunos sensores del iPhone, ha presentado unos sensores de luz y de proximidad por infrarrojos, capaces de ponerse detrás de la pantalla.
Lo llaman sensores “behind OLED” (detrás del OLED), haciendo referencia a que quedarían incluidos dentro de la superficie de pantalla y no precisarían de un espacio dedicado -el notch-.
AMS promete que los fabricantes de dispositivos móviles -ya que no sólo produce componentes para Apple- serán capaces de disminuir los bordes de sus móviles gracias a estos sensores behind OLED.
Aún así, debemos recordar que el notch ha venido para quedarse. Nos guste o no, Apple lo han incluido en el diseño de sus iPhone como un símbolo de la marca como ya lo es el botón Home de los modelos de iPhone anteriores. Un símbolo que ha durado 10 años y que nos hace pensar que el notch será el símbolo para la próxima década.
Por supuesto, como ya hizo el botón Home, es posible que cambie su diseño. De hecho, estos sensores que se sitúan detrás de la pantalla podrían hacer que disminuyera la longitud del notch (como ya hemos visto en algunos rumores), pues serían menos la cantidad de sensores y demás componentes que requieran de ese espacio, como la cámara o el altavoz frontal.