Los rumores sobre un iPhone plegable han circulado durante años, pero en los últimos meses han ganado fuerza con filtraciones que revelan detalles sobre sus dimensiones y proveedores clave. Este dispositivo marcaría la entrada de Apple en el mercado de los teléfonos plegables, un sector en el que hasta ahora la compañía ha preferido no aventurarse. Sin embargo, nuevas informaciones sugieren que el proyecto avanza con pasos firmes y que el esperado producto podría ver la luz en 2026.
Dimensiones y diseño: un formato distinto al de otros plegables
Según filtraciones recientes, el iPhone plegable tendría dos pantallas: una exterior de 5,49 pulgadas y una interna que, al desplegarse, alcanzaría las 7,74 pulgadas. Esta configuración recuerda a modelos como el Oppo Find N5, aunque con una proporción diferente que podría hacer del dispositivo algo único en su categoría. Un aspecto clave que Apple busca perfeccionar es la eliminación del pliegue visible en la pantalla. Este ha sido uno de los grandes desafíos en los móviles plegables y la compañía de Cupertino quiere ofrecer una experiencia visual sin interrupciones. Para lograrlo, se está trabajando en la integración de nuevas tecnologías de bisagra y pantalla flexible.
Para garantizar una producción de alto nivel, Apple ha recurrido a proveedores de confianza. Se ha confirmado que Samsung suministrará las pantallas OLED flexibles, un elemento clave para un plegable. Además, Corning será el encargado del vidrio protector, buscando mejorar la durabilidad del panel y minimizar posibles daños. Otro nombre relevante en la fabricación del dispositivo es Amphenol, un proveedor que ya colabora con Apple en la fabricación de bisagras para los MacBook. Su experiencia será clave para diseñar un sistema de plegado resistente y confiable.
Fecha de lanzamiento y expectativas
Aunque no hay una fecha exacta para su presentación, los informes coinciden en que el iPhone plegable podría llegar en la segunda mitad de 2026. La compañía aún está en proceso de selección de proveedores y perfeccionamiento de la tecnología, por lo que cualquier retraso en el desarrollo podría afectar su lanzamiento.
Apple no suele apresurar la llegada de nuevas tecnologías a su catálogo si no están completamente listas. La ambición de la compañía es que este dispositivo sea tan innovador e icónico como lo fue el primer iPhone en 2007. Para ello, están apostando por un diseño sin precedentes que no solo iguale a la competencia, sino que la supere en aspectos clave como la experiencia de usuario y la durabilidad.