Tras el anuncio de una revisión a la baja de los ingresos de Apple en este primer trimestre de 2019, que comprende el periodo que va desde octubre hasta diciembre de 2018, había mucha expectación ante la publicación de los resultados financieros de la compañía, que acaba de ocurrir. Apple ha anunciado unos ingresos que consiguen que «el batacazo» que muchos preveían sea realmente el segundo mejor trimestre de su historia.
Unos ingresos totales de 84.310 millones de dólares y unos beneficios de 19.965 millones de dólares son los datos más relevantes de este trimestre, que si lo comparamos con el mejor trimestre de su historia, justo hace un año, resulta que son 3.983 millones de dólares menos en ingresos y 100 millones de dólares menos en beneficios.
En esta gráfica, para que quede de forma más visual, se pueden ver los ingresos de la compañía en los diferentes trimestres de los últimos años, y en rojo el mejor trimestre de su historia (Q1 2018) y el segundo mejor trimestre de su historia (Q1 2019). Las cifras brutas que ofrece Apple dejan lugar a pocas dudas sobre la salud financiera de la compañía, aunque sí que hay datos que generan (o deberían) preocupación, porque la caída de ingresos por el iPhone es importante.
El smartphone de Apple ha supuesto una caída del 16% en ingresos respecto al mismo trimestre del año anterior, lo cual supone unos 9.500 millones de dólares menos ingresados por las ventas de su producto estrella. Si la caída en ingresos totales ha sido sólo de cerca de 4.000 millones ha sido gracias a que otras categorías se han portado muy bien en ventas y han compensado esta caída. Los ingresos por iPad han crecido un 14%, y las grandes estrellas de los últimos trimestres que son la categoría «Servicios» y la nueva categoría «Wearables, Hogar y accesorios» han subido un 28% y un 33% respectivamente.
El impacto de la caída de ventas en China ha sido grande. Si en el mismo periodo del año pasado los ingresos del país asiático supusieron un 20% respecto al total, este año se han quedado sólo en un 16%. Los ingresos en Estados Unidos han supuesto un 44% (un 40% el año pasado) y el resto de regiones se han mantenido estables.
La salud financiera de la compañía sigue siendo envidiable, si bien no se puede ocultar que las ventas de iPhone no pasan por su mejor momento, y Apple deberá asumir nuevas estrategias para volver a impulsar un segmento que no ha tenido los resultados esperados.