Hace algo más de una semana, Apple y Qualcomm anunciaron que habían llegado a un acuerdo para dar por zanjadas las diferentes disputas judiciales que les están enfrentando en los el último año y medio y que de momento ha perjudicado en mayor medida a los chicos de Cupertino, al menos en Alemania y China.
Diversos analistas afirmaron que el acuerdo entre ambas empresas le había costado a Apple cerca de 6.000 millones de dólares, una cifra no muy alejada de la realidad, según los datos financieros correspondientes al primer trimestre del año que ha presentado el fabricante de procesadores y a los que ha tenido acceso Axios.
Según afirma Axios, Qualcomm registrará unos ingresos de entre 4.500 y 4.700 millones de dólares del acuerdo al que ha llegado con Apple, cifra que incluye un pago en efectivo de Apple y el fin de todos los juicios y demandas que tienen pendientes ambas empresas, de forma que todo seguirá como hasta que ambas compañías comenzaron su particular batalla de gigantes.
Ninguna de las dos compañías ha ofrecido detalles específicos del acuerdo, pero inicialmente se había estimado que esa cifra se fijaba entre los 5.000 y 6.000 millones de dólares. El acuerdo incluye un contrato de licencia de seis años y un contrato de suministro de chips de varios años, a través del cual Qualcomm será el principal proveedor del chip 5G de los futuros iPhone que lleguen al mercado.
Horas después del anuncio del acuerdo entre ambas empresas, Intel anunció oficialmente que abandonada el desarrollo de un chip 5G, ya que su principal y prácticamente único cliente iba a ser la propia Apple. Sin embargo, Apple no quiere depender exclusivamente de Qualcomm y los más probable es que busque otros proveedores.
Samsung podría ser el otro proveedor de los chips 5G que Apple tiene previsto comenzar a utilizar en los diferentes modelos de iPhone que lance al mercado a partir de 2020, aunque puede que no sea el único, ya que Huawei y MediaTek también están trabajando en unos propios.