Apple ha utilizado la tecnología biométrica para garantizar la seguridad desde hace varios años. Comenzó con Touch ID, un sistema de desbloqueo a través de la huella dactilar y luego presentó Face ID, un sistema de seguridad basado en la detección facial. Mucho tiempo después y con la presentación de las gafas Vision Pro, Apple ha presentado Optic ID, su nuevo sistema de reconocimiento de iris que garantiza la seguridad de este nuevo producto.
El reconocimiento de iris llega de la mano de Optic ID
La singularidad del iris de cada individuo es la clave del funcionamiento de Optic ID. La probabilidad de que dos personas diferentes tengan iris idénticos es extremadamente baja. De hecho, la probabilidad es de 1 en 10 elevado a 78, extraordinariamente baja. Y esa es la base de los sistemas de reconocimiento de iris: cada iris es único.
En el interior y enfocando hacia los ojos, las Apple Vision Pro cuentan con un complejo sistema de seguimiento ocular formado por LED y cámaras infrarrojos que proyectan patrones de luz en cada ojo. Esto permitiría por un lado el funcionamiento de Optic ID y, por otro, el manejo de la interfaz de visionOS sin necesidad de un elemento externo en forma de ratón.
Apple asegura que las Vision Pro han sido diseñadas para garantizar la privacidad y seguridad del usuario. Toda la información generada a raíz de Optic ID se almacena dentro del dispositivo en el procesador Secure Enclave con el objetivo de que únicamente el usuario pueda acceder a esa información y no Apple o desarrolladores de terceros, al igual que ocurre con Touch ID o Face ID.
No deja de ser un paso más, en este caso, en la evolución de la tecnología biométrica que permite a Apple encontrar nuevas formas de proteger nuestros dispositivos. En este caso, Optic ID funciona de forma similar a Face ID pero únicamente analizando el iris y no los puntos claves de la cara como hace actualmente ese sistema de seguridad.