En 2018, Apple se vio obligada, al igual que el resto de compañías tecnológicas, a almacenar los datos de las operaciones de iCloud de los clientes chinos en servidores ubicados en el país, dando la llave a las autoridades chinas para puedan acceder todo el contenido que almacenan los ciudadanos del país, por mucho que Apple diga lo contrario.
Este fue el primer paso del gobierno chino para controlar a sus ciudadanos. Pero no el único, ya que a partir del 1 de noviembre, entra en vigor una nueva ley de protección de datos que requiere que las empresas almacenen más datos de forma local evitando que los transfieran fuera del país.
Esta nueva ley, obligará a la compañía a almacenar en servidores de china información aún más confidencial de los usuarios como las estadísticas de uso y registros de comunicación del iPhone y resto de productos de Apple (datos que Apple recopila si el usuario da su permiso cuando configura el iPhone por primera vez).
Diversas analistas afirman que esa información podría usarse para rastrear e identificar a disidentes políticos y activistas en China.
Esta nueva ley, que va de la mano de otra en entró en vigor el 1 de septiembre, según afirman The Information, pondrán a Apple en un aprieto, ya que según expertos legales y analistas consultados por este medio, son una nueva medida de presión para que la compañía siga operando en el país.
Este mismo medio afirma que en 2015, las autoridades chinas visitaron las oficinas de Apple en Shanghái solicitando a la compañía que comenzara almacenar información como datos de ventas de sus tiendas minoristas en el país, aunque no está claro si Apple llegó a cumplirlo en algún momento.
Censura en la App Store
En los últimos años, Apple ha retirado un gran número de aplicaciones disponibles en la App Store, aplicaciones de todo tipo pero principalmente aquellas que ofrecen información a medios extranjeros, como es el caso más reciente de Yahoo Finance, como os informamos hacer unos días.
Sin embargo, estas no son las únicas aplicaciones que están en el ojo de la Administración de Ciberespacio de China, ya que hace una semana, Apple retiró a petición de esta administración, una aplicación del Corán, a pesar de que es una religión reconocida oficialmente por el gobierno.
Para controlar el acceso a la información, desde hace 4 años las VPN está totalmente prohibidas, tanto en la App Store como fuera de ella. Toda aplicación o grupos de aplicaciones que permitan a los usuarios saltarse el control de la información del gobierno, no tienen cabida en la App Store china.
Descentralizando la producción
Apple lleva más de un año descentralizando la fabricación de la mayoría de sus productos y componentes desde China a otros países como Vietnam y la India, como si supiera que más tarde o más temprano, tendrá que cortar relaciones con el país, ya sea de motu propio u obligado por el gobierno chino.
La importancia del mercado para Apple
China es un mercado crítico para Apple, y la compañía ha hecho muchas concesiones en materia de seguridad y privacidad en el pasado. Pero si Apple cumple con las nuevas regulaciones, es probable que se enfrente mayores críticas tanto de legisladores estadounidenses como de activistas de derechos humanos.
La motivación de la Administración del Ciberespacio China para crear esta nueva ley para almacenar más datos de forma local, es que les preocupa que los datos de los ciudadanos chinos almacenados fuera del país están a disposición de los servicios de inteligencia de Estados Unidos.
Sin embargo, los datos de los usuarios almacenados dentro de China pueden ser fácilmente vigilados por las autoridades estatales. Vamos, que no quieren compartir esos datos con la CIA.
Cabe recordar que las empresas tecnológicas que trabajan en Europa, también están obligadas a almacenar en el viejo continente los datos de los usuarios europeos.
LinkedIn ha dicho basta ya
Mientras que Tesla ha comenzado a almacenar los datos de sus clientes en los servidores de China, esta nueva ley ha contribuido a que LinkedIn (pertenece a Microsoft), haya anunciado que cierra operaciones en el país alegando «un entorno operativo significativamente más desafiante y mayores requisitos de cumplimiento».
Google en 2010, fue la primera que rápidamente se cansó de las continuas peticiones de censura del gobierno chino y desde entonces, no ha hecho ningún movimiento para volver al país, a pesar de ser una potencial fuente de ingresos para cualquier compañía tecnológica.
Ya sabemos que hará Apple
Apple es una empresa, no una ONG, por lo que está para ganar dinero. Sabía perfectamente lo que hacía y las consecuencias que podría tener en un futuro cuando comenzó su expansión en el país, país donde actualmente Apple tiene presencia a través de 43 Apple Store.
¿Protegerá Apple a sus clientes de un régimen autoritario? ¿Protegerá sus intereses económicos y seguirá colaborando con el régimen chino? Lamentablemente, todos sabemos la respuesta.
Apple se escudará en que tiene que cumplir las leyes locales de los países donde tiene presencia. Y teniendo en cuenta que en China, uno de cada cuatro smartphone que se venden es un iPhone, la idea de cerrar dejar de vender en China ni se les pasa por la cabeza.
Ahora bien, es probable que si los legisladores estadounidenses y las organizaciones de derechos humano hacen suficiente ruido, Apple pueda cambiar su estrategia y, por primera vez, plantarle cara al gobierno chino.
Conforme se acerca la fecha de entrada en vigor de esta nueva ley, el 1 de noviembre, iremos conociendo más información acerca de lo que tiene previsto hacer Apple al respecto.
Es probable, como ha sucedido con otras leyes, que el gobierno chino retrase la entrada en vigor de esta nueva ley, aunque es poco probable ya que la compañía con sede en Cupertino ya tiene servidores en el país donde actualmente se almacenan los datos de los usuarios de Apple.