El Instituto Tecnológico de California, conocido como CalTech, demandó a Apple y Broadcom en 2016 por hacer uso de la tecnología inalámbrica creada por ellos tanto en el iPhone, como en el iPad, Apple Watch, AirPort y en los Mac. El veredicto del juicio que se celebró hace unos días ya se ha publicado y no son buenas noticias para Apple.
Tanto Apple como Broadcom se han visto condenadas a pagar de forma conjunta al Instituto Tecnológico de California 1.100 millones de dólares. Apple asumirá la mayor cuantía 838.8 millones de dólares mientras que Broadcom asumirá el resto 270.2 millones de dólares.
El veredicto del jurado es el sexto mayor sobre patentes de todos los tiempos, un veredicto con el que, obviamente, no están de acuerdo ni Apple ni Broadcom y ya han anunciado la decisión de apelar. Apple afirma que si bien estaba haciendo uso de los chips de Broadcom que hacían uso de la tecnología de CalTech, no debería ser responsable de la infracción.
Sin embargo, el jurado no tuvo en consideración esos argumentos y consideraron a Apple igual de culpable que Broadcom por utilizar esos chips. Los abogados de ambas compañías han negado cualquier infracción y afirman que el instituto no tiene derecho a daños y perjuicios significativos, incluso si existieran.
Un portavoz de CalTech afirma está contento con la decisión del jurado añadiendo que la escuela está comprometida a proteger su propiedad intelectual para promover su misión de expandir el conocimiento humano y beneficiar a la sociedad a través de la investigación integrada en la educación.
Este veredicto es uno de los más grandes contra Apple en toda su historia y que no está relacionado con trolls de patentes, empresas que compran otras más pequeñas con patentes que están a punto de desaparecer para demandar a los grandes y sacar una importante tajada.