Una vez más entramos en la problemática de la gestión de datos y privacidad entre aplicaciones. Cuando instalamos aplicaciones desde fuentes seguras, automáticamente les brindamos nuestra confianza. Sin embargo, es habitual ver estos extraños movimientos, según los cuales, aplicaciones que no deberían requerir más que acceso a la cámara o a la localización (como Pokemon Go), solicitan acceso incluso a la agenda de contactos y la posibilidad de publicar en nuestras redes sociales. Por ello, es importante conocer hasta qué punto estamos consintiendo el acceso a nuestra información personal a aplicaciones que no la necesitan para mejorar nuestra experiencia de usuario. Atento, Pokemon Go obtiene acceso total a tus cuentas de Google y esto está enfureciendo a muchos usuarios.
Tras aceptar las condiciones de instalación de Pokemon Go, e iniciar sesión utilizando nuestra cuenta de Google (el método más rápido y sencillo de los que ofrece), nos enteramos de que al iniciar sesión con nuestra cuenta Google le estamos brindando acceso total a ver y modificar cualquiera de las informaciones contenidas en nuestra cuenta. De hecho, como ya avisaba Luis Padilla en su Podcast diario, lo único a lo que no se le da acceso es a modificar y eliminar la cuenta de Google, para todo lo demás es completamente libre.
Esto es un arma de doble filo, porque no vamos a acusar a la mayoría, pero muchas aprovechan estos datos que les ofrecemos a cambio de sus aplicaciones gratuitas, de hecho, esta es su forma de rentabilizar la aplicación. Una gran cantidad de empresas ligadas a la economía y a la sociedad de consumo están encantadas de hacerse con esa ingente cantidad de datos a un buen precio, con ello, elaboran las estadísticas y previsiones con las que posteriormente controlar el mercado en cualquier ámbito. Es este, el principal motivo de que a los usuarios no les haya hecho mucha gracia ofrecer sus datos.
¿Qué hay tras el negocio de Pokemon Go?
Si vamos más allá en el entramado acerca de Pokemon Go, para empezar, nos enteraremos de que el juego tiene derechos sobre las licencias de Nintendo, pero no es propiedad de Ninentdo. De hecho, parece ser que Nintendo lo único que ha hecho en ella es dar permiso y poner la mano. El verdadero encargado de la elaboración y desarrollo de la aplicación es Niantic. Ahora el segundo sujeto al que debemos apuntar es Google, Niantic es una de las cientos de sucursales o empresas satélites con las que cuenta Alphabet, la raíz de Google.
Por otro lado, el sistema de geolocalización y desarrollo de mapas de Pokemon Go, así como la implementación de la realidad aumentada, son cosecha de Google. En definitiva, nos encontramos con un cuadro de Google firmado por Nintendo, lo que no puede contrariar a que la aplicación es realmente buena y está revolucionando el mundo entero. Esta aplicación ha hecho a Nintendo crecer un 25% en bolsa en pocos días, dándole un soplo de aire fresco a una empresa que está de capa caída y sobrevive a base de sus fans acérrimos.
En definitiva, da miedo pensar que lo que parecía Pokemon no es ni tan siquiera Nintendo, pero de esto va el mundo de la tecnología y el desarrollo de software, no es precisamente un indicio que nos deba preocupar, pero si unos datos que se empeñan en no hacer notoriamente públicos.
Niantic ha confirmado que Pokemon Go accede casi la totalidad de datos de nuestras cuentas Google, no obstante, lo ha achacado a un error de desarrollo, y han negado que esa fuera su intención, por lo que han prometido solventar esta polémica en la próxima actualización. No obstante, el daño ya está hecho, sólo unos minutos en nuestras cuentas les basta para acceder a esta información, y la mayoría de la gente se la está descargando desde el momento de llegad a su país, de hecho, dejadme aventurar que no habrá actualización alguna hasta semanas después de su publicación mundial completa.
