Un estudiante australiano de 19 años, y residente en Melbourne hackeó los servidores de Apple en múltiples ocasiones durante dos años, obteniendo más de 90 GB de archivos. Una vez se ha celebrado el juicio, este joven, del que no se ha facilitado el nombre por razones legales, se ha librado de la condena de 8 meses de prisión.
El tribunal de menores de Australia, declaró culpable a este joven por piratear los servidores de Apple durante los años 2015 y 2016 en diversas ocasiones, descargándose una gran cantidad de información y entre la que se encontraba las cuentas de un gran número de clientes además de archivos seguros.
Según el juicio que se ha celebrado, el joven comenzó a la edad de 16 años, y afirmó que siempre había soñado con poder trabajar en Apple porque admira a la empresa. A pesar de haber sido condenado a 8 meses de prisión, el magistrado encargado del caso dicto la orden de libertad condicional además de afirmar que en su historial no se reflejaría la condena.
El magistrado basó su decisión después de escuchar como el joven había sido aceptado en la universidad para estudiar criminología y seguridad cibernética. La investigación comenzó cuando Apple detectó el acceso no autorizado a sus servidores. Una vez bloqueó el acceso, lo notificó al FBI quien a su vez se puso en contacto con la Policía Federal Australiana, que efectuó un registro en el domicilio de la familia del joven.
Durante el registro, se encontraron una gran cantidad de archivos relacionados con Apple dentro de una carpeta que joven llamada hacky hack hack hack así como dispositivos que coincidían con la dirección IP del origen de las intrusiones en los servidores de Apple. Poco después de ver la luz este incidente, Apple afirmó que los datos de sus clientes no se habían visto comprometidos en ningún momento.
2 comentarios, deja el tuyo
Como que no se vieron comprometidos y esos 90 GB de que eran.
Ahora está que nos lo creamos o no.