La renovación que presentó hace dos días del Apple TV, pasando a ser la quinta generación, aunque su nombre comercial es Apple TV 4k, ha puesto una completa renovación de su interior, donde no solo encontramos el mismo procesador que los iPad Pro más potentes, sino que además viene acompañado de 3 GB de memoria RAM, todo ello para que la reproducción de contenido en 4k HDR vaya lo más fluida posible.
Pero no todo depende del procesador, sino que la velocidad de la conexión también incluye y mucho. En los detalles técnicos del Apple TV, la compañía con sede en Cupertino afirma que para poder disfrutar de contenido en 4k, necesitamos que nuestra conexión a Internet sea de 15 Mbps o superior.
El modelo de cuarta generación llegó al mercado con una conexión Ethernet 10/100 con unas limitaciones que nunca acabamos de entender, lo que obligaba en la mayoría de los casos a utilizar la conexión Wifi del mismo que nos ofrecía mayor velocidad de conexión, ya que es del tipo 802.11ac. El nuevo Apple TV 4k, también ha renovado este puerto pasando a utilizar Gigabit Ethernet, lo que nos permitirá conseguir velocidad de bajada mediante cable superiores a las que nos ofrece el modelo anterior.
La decisión que tomó Apple utilizando esa conexión de red más lenta, no debería extrañarnos, ya que la compañía suele tomar este tipo de decisiones por alguna razón, es de suponer, razón que obviamente nunca tienen que ofrecer, pero que a la mayoría de usuarios no acaban de entender. Sin ir más lejos, mi Mac Mini de 2010 ya disponía de una conexión por cable 10/100/1000 mientras que el Apple TV, lanzado en el 2015, utilizaba la 10/100.
Si el dispositivo no era compatible con contenido 4k parece que Apple no se quiso molestar en ofrecer una conexión de mayor velocidad, a pesar de estar disponible y que probablemente el precio de dicho componente sea prácticamente el mismo o tengan una diferencia mínima.
