¿Está Apple perdiendo calidad en sus productos?

Hace unos días os hablaba de los abusos que Apple estaba cometiendo a mi juicio en el mercado, y por lo tanto, sobre los consumidores más fieles. Sin embargo, no solamente se trata de que Cupertino intente eliminar promociones, subir precios de forma injustificada o suponer que el fan va a seguirla independientemente del camino que decida tomar. Este asunto va mucho más allá, y algunos expertos ya coinciden en el hecho de que Apple ha perdido calidad. Continúa siendo la dueña del mercado y lo que plantea se alaba como un gigantesco invento, pero las cosas han cambiado mucho desde los inicios. Es casi como si la filosofía de la manzana se estuviese diluyendo poco a poco.

Opiniones como la que Marco Arment plasma en su estudio Apple has lost the functional high ground, comienzan a ser mayoritarias. De hecho, en el CES 2015, el fundador de Tumblr CTO declaró que la promesa que Apple hacía con cada uno de sus productos y que rezaba con un «simplemente funciona«, se aplica a cada vez una menor categoría de gadgets. A la espera del Apple Watch, el producto estrella de este año, habrá que analizar si estas teorías son una realidad, o si Apple está dispuesta a dar un giro a sus nuevas maneras de crear en tecnología.

No es tanto hardware como software

El problema al que se enfrenta Apple, y que ha sido mencionado por numerosos personajes de la escena, e incluso se ha llevado críticas desde adentro es más de software que de hardware. Hasta el momento no nos encontramos con gadgets que se puedan considerar de una calidad inferior a la competencia. Apple continúa innovando en la búsqueda de mejores componentes, añade funcionalidades que pueden hacer la vida más fácil al usuario y apuesta por acabados de diseño. Pero en el interior, las cosas no van tan bien como se está comentando en el interior de Cupertino.

Particularmente, continúo encantada con mi Mac o con iOS. No podría decir que ninguno de los dos sistemas operativos me haya decepcionado hasta el punto de querer abandonarlo para siempre. Sin embargo, si abrimos la mente al mercado, vemos como en el caso de Linux se han creado desarrollos que son capaces de superar fácilmente, tanto en usabilidad como en facilidad de manejo al actual Yosemite. Lo mismo ocurre en el mundo iOS, que cada vez nota más la presencia y compentencia de Android y sus nuevas interfaz de usuario para los que no tienen conocimientos del mundo tech.

Otro punto caliente en el caso del software de Apple es el hecho de todos los bugs que han ocurrido en las últimas actualizaciones. Aunque no podemos llevar la cuenta, en el artículo que mencionamos anteriormente se dice que en realidad han sido más que en cualquier otra actualización. Y cada vez aparecen más problemas, y las soluciones parecen retrasarse. De hecho, casi pareciera que las nuevas actualizaciones llegan precisamente con la intención de resolver todos esos errores antes que de aportar algo nuevo a los usuarios que ya las tienen instaladas.

Por suerte, Apple es muy grande y creo que detrás de ella sigue habiendo grandes ideas y el consumidor está por delante de todo. Sin embargo, hay que empezar a pensar que no basta solo con decirlo, sino que hay que demostrarlo en el día a día. Apple es fantástica. Apple nos encanta. Pero si las cosas no se adaptan a los tiempos que corren y no se apuesta por seguir siendo el mejor, no tardaremos en cambiar de idea. Y eso solo depende de la propia Cupertino.