La opción de Apple para editar fotografías es realmente buena, pero en la App Store hay alternativas gratuitas a iPhoto que pueden plantarle cara para los usuarios que tampoco tienen el listón realmente alto. Fotor es sin duda una de ellas, o al menos a mí me lo parece.
Buen gusto
Lo primero que llama la atención sobre Fotor es que se trata de una aplicación diseñada hasta el último píxel, con todos sus gráficos adaptados a la Retina Display tanto del iPhone 4/4S como del iPhone 5 y con una atención al detalle magnífica. El primer paso por lo tanto lo da con creces, superando ampliamente las expectativas que tenía en un inicio.
Las distintas pantallas están muy bien organizadas y aprovechan la pantalla del iPhone al máximo, dejando pocos huecos libres pero sin agobiarnos en exceso con la distribución de los elementos que tenemos ubicados en pantalla. Buen ejemplo es la vista de efectos, que nos da una preview en tiempo real de como quedará la foto a la vez que nos muestra ocho efectos en pantalla y el submenú para elegir la familia de efectos que queremos utilizar.
Muy completa
Otra parte realmente positiva de la aplicación es que lo tiene prácticamente todo y envidia a iPhoto y sus competidores en muy pocas cosas. Cuenta con el clásico asistente de mejora en un toque que le irá de fábula a los que tengan poco tiempo de mejorar las fotografías, pero si queremos ir más allá hay un amplio abanico de posibilidades: podemos cambiar el tamaño de la foto, recortarla, rotarla, darle efectos de todo tipo -hay muchísimos-, añadirle bordes al más puro estilo Instagram o realizar el efecto tilt-shift en medio minuto gracias al sistema que trae integrado, el cual incluso nos permite simular la apertura del objetivo.
Hay muchas apps que las uso un tiempo antes de hacer la review, las pruebo y las borro. Con Fotor os aseguro que no va a pasar lo mismo, ya que he tenido una experiencia de uso realmente positiva y a partir de ahora será la aplicación que use para retocar algunas de mis fotos en el iPhone, y eso que tengo iPhoto pero en ocasiones se me hace demasiado pesada con tanto efecto y con esos menús poco prácticos en ocasiones. Es lo bueno de la vida, poder elegir.
