No son pocos los usuarios que esperan con ganas el día en el que Apple lance un iPhone con una pantalla OLED que ofrezca colores más vivos y consuma menos batería (si se usan fondos negros), pero se podría decir que Japan Display, uno de los proveedores de pantallas de Apple, está desesperado porque los de Cupertino hagan el cambio. Y es que JDI ha anunciado unas pérdidas de más de 257 millones de Euros (31.800.000¥) en 2016 por el aumento del valor del Yen y el descenso de ventas del iPhone y el iPad.
Como todos sabéis, el iPhone 6s usa pantalla LCD, pero se espera que den el salto a las pantallas OLED en 2017, eso en el mejor de los casos. Si no es el año que viene, el iPhone 8, o como quiera que se llame el teléfono que presenten en 2018, ya llegará con pantalla OLED y, posteriormente y si miramos cómo han sido los lanzamientos de dispositivos iOS en los últimos años, poco tiempo después lanzarán un iPad con pantalla OLED.
Los gerentes de Japan Display rezan para que Apple dé el salto a las pantallas OLED
Pero si yo fuera uno de los ejecutivos de Japan Display, tampoco las tendría todas conmigo en el momento en el que Tim Cook y compañía den el salto a las pantallas OLED: Samsung es un fabricante muy importante en la investigación de pantallas OLED y producción de AMOLED y, según los rumores, también está construyendo unas instalaciones en las que esperan fabricar pantallas para Apple. En cualquier caso, a los de Cupertino no les gusta realizarle todos los pedidos a una compañía y, dependiendo de la calidad y precio del producto, podrían realizarle más o menos pedidos también a Japan Display.
El problema, u otro de ellos, es que Samsung no es el único problema de Japan Display: Foxconn también quiere meterse en el mercado de las pantallas OLED, para lo que compró Sharp. Con este panorama, entendemos la desesperación de los ejecutivos de JDI.