Estamos ante una de las Keynote más esperadas de los últimos años. El iPhone X, o como quiera Cook que se llame, ya estaba en boca de todos antes de que el iPhone 7 fuera presentado. Se trata del iPhone del décimo aniversario, del primer cambio en diseño desde hace 3 años, de la eliminación del icónico botón inicio del iPhone.
Tanta expectación ha hecho que los medios hayan estado más pendientes que nunca de las filtraciones, y entre las ya más que acostumbradas «filtraciones controladas» de Apple, las típicas piezas que salen de la cadena de montaje, y la traición de un empleado de la compañía, la realidad es que son muchos los que piensan que todo está dicho. ¿Qué podemos esperar del evento del día 12? Conocemos el guión, pero hay que ver aún la película.
Las filtraciones, siempre con control
Seamos realistas: Apple sabe guardar un secreto cuando quiere. Lo demostró en gran parte con el Apple Watch, y últimamente con los AirPods. Son dos productos de los que apenas supimos nada antes de su presentación. Sí, sabíamos que Apple estaba trabajando en ellos, pero ningún detalle más sobre su funcionamiento, ni siquiera sobre su diseño. Hubo filtraciones pero terminaron por ser falsas. La compañía de Cupertino controla las filtraciones y deja que sepamos lo que realmente quiere que sepamos.
¿Alguien duda de que todo lo que descubrimos gracias al firmware del HomePod no fue intencionadamente filtrado por Apple? ¿Acaso la compañía no sabe que cualquier firmware va a ser destripado hasta el más mínimo elemento? Por supuesto que lo sabe, de hecho en las Betas de iOS 11 no ha habido referencias importantes a nada del iPhone X, hasta que se filtró la versión Golden Master el otro día, algo con lo que no contaban.
Esas filtraciones ayudan a generar el llamado «hype», esa expectación que ninguna otra compañía sabe generar en los medios y en la gente con la intensidad que lo hace Apple. Incluso puede que lo usen como globos sonda para saber la opinión de los usuarios y cómo se aceptarían algunos cambios. El debate sobre el Touch ID delante o detrás seguro que ha sido seguido con interés desde Cupertino. Pero de vez en cuando llega un imprevisto que te destroza los planes. No nos olvidemos de que Apple trabaja en vario prototipos de iPhone con características diferentes hasta que se decide por uno, y en esa decisión se valoran muchas cosas.
Una traición con la que no contaban
Los más antiguos seguidores de Apple seguro que recuerdan la famosa filtración del iPhone 4, ese dispositivo que alguien de Cupertino dejó olvidado en un bar y que vendieron a Gizmodo. Fue una de las mayores filtraciones de la compañía y objeto de múltiples historias acerca de cómo Apple luchó para recuperar su prototipo. Pues este año Apple ha sufrido una traición incluso mayor, porque ha sido intencionada: uno de sus empleados puso en bandeja hace unos días los secretos más ocultos acerca del iPhone X.
A pesar de lo que muchos hayan escrito, esta filtración no ha sido un error torpe de Apple por dejar la versión final de iOS 11 al alcance de cualquiera. Sí, es cierto que cualquier persona con el enlace de descarga podría haber conseguido el firmware del iPhone X, pero ese enlace no era nada fácil de adivinar, estaba lleno de códigos absolutamente fuera del alcance de cualquiera, salvo de los que tuvieran el enlace completo por ser empleados de la compañía. Y no cualquier empleado lo tendría.
Lo ha dicho John Gruber y lo ha confirmado la BBC: un empleado de Apple traicionó a la compañía filtrando los enlaces de descarga a 9to5Mac y a MacRumors. Puede que incluso a más blogs y otros medios especializados, pero muchos seguro que no han querido entrar en la lista negra de Apple. Desde luego será mejor que le hayan pagado mucho por filtrar el enlace, porque necesitará un buen plan de pensiones por no hablar de un buen abogado.
Lo mejor está aún por ver
Muchos están incluso restando valor al dispositivo porque ya sabemos todo lo que traerá, nada más lejos de la realidad. Lo que sí es cierto es que la presentación del día 12 va a ser más descafeinada de lo que Apple tenía previsto. Se han desvelado más detalles de los que Apple tenía pensado, pero aún así lo mejor está por ver. Conocemos el guión, pero la película puede aún sorprendernos.
Sí, ya se ha desvelado el proceso de configuración del Face ID, sabemos el nombre del iPhone X, incluso conocemos que el Modo Retraso de la cámara tendrá nuevas opciones de iluminación. Los gestos de la multitarea, el procesador de 6 núcleos y la pantalla de 5,8 pulgadas. Hasta nos podemos descargar ya los fondos de pantalla de la nueva versión. Me he leído los 5 libros de Canción de Hielo y Fuego, pero puedo disfrutar de la serie de Juego de Tronos como el que más.
No sabemos cómo funciona el Face ID, más allá de cómo se configura. ¿Demostrará Apple que sí se puede usar el reconocimiento facial como mecanismo de seguridad y no como las demos trucadas de Samsung? El vídeo en el que nos muestren cómo se desbloquea el iPhone, cómo se paga con el iPhone o cómo unas gafas de sol no impiden que puedas usar el Face ID puede ser épico, y eso está por ver. Por no hablar de las nuevas funciones de la cámara del iPhone 8 con los nuevos modos de escena inteligentes, o cómo podremos generar los emoji animados para enviárselos s nuestros amigos. ¿Alguien duda de que habrá una demostración de lo que el iPhone 8 puede hacer con la nueva Realidad Aumentada de Apple? Y esas cámaras con funciones 3D, ¿qué serán capaces de hacer?
Con el iPhone 4 Steve Jobs tuvo un momento épico al mostrar el nuevo diseño, ya desvelado por Gizmodo, diciendo «que alguien me pare si ya habéis visto esto» (momento 0:50 en el vídeo) lo cual generó las risa del público. No sabemos qué reacción tendrá Tim Cook, si es que la tiene, con su estilo mucho más sobrio, pero creo que aún hay mucho que ver en la Keynote y que Apple aún tiene (y debe) sorprender durante la misma.
Que excelente articulo, buen trabajo.