Después de más de un año de rumores relacionados con las balizas de localización de Apple, la compañía con sede en Cupertino presentó oficialmente los AirTags, las balizas de localización que llegan al mercado como una alternativa a TILE, quien ya ha manifestado su malestar al respecto.
Tras el lanzamiento, la vicepresidenta de marketing mundial de productos para el iPhone, Kaiann Drance y el director senior Ron Huang, han hablado con los chicos de Fast Company acerca del diseño, funcionamiento privacidad… En cuanto al diseño, afirman que querían uno que fuera único que nadie más hubiera utilizado antes.
Respecto a la privacidad, afirman que una de las principales virtudes de los AirTags es la privacidad. Este dispositivo utiliza redes encriptadas de forma que ni Apple ni ninguna otra persona puede conocer la ubicación. Además, si un usuario pierde de vista el dispositivo asociado a la baliza, no podrá resetearse para ser utilizada de nuevo.
Todo este proceso está encriptado de extremo a extremo, de modo que nadie más que el propietario del AirTag -ni los propietarios de los dispositivos de crowdsourcing que recogen la ubicación del AirTag ni la propia Apple- tiene acceso a la ubicación actual o pasada del AirTag.
Además, los identificadores Bluetooth que emiten los AirTags no sólo son aleatorios, sino que «se rotan muchas veces al día y nunca se reutilizan, de modo que cuando uno viaja de un lugar a otro con el AirTag, no puede ser reidentificado».
Drance y Huang también señalan que, aunque casi mil millones de dispositivos de Apple actúan como una red de seguimiento de origen colectivo que ayuda a seguir los AirTags, el propietario del AirTag nunca puede ver de qué dispositivos está haciendo ping la ubicación de su AirTag ni a quién pertenecen esos dispositivos.
¿Ideal para niños y mascotas?
Muchas son las personas que consideran este dispositivo ideal no para rastrear objetos, sino para rastrear a niños o mascotas. Sin embargo, desde Apple afirman que no está diseñado para esa función, ya que eso está la función Family Setup del Apple Watch en el caso de los niños.
Pero claro, una baliza es mucho más barata que un Apple Watch, además, si se trata de niños pequeños, de poco o nada les sirve el reloj inteligente de Apple. Con los AirTags es mucho más sencillo y barato seguir el rastro a un niño cuando vamos de excursión, a un parque de atracciones, a un centro comercial…
Respecto a la posibilidad de utilizar un AirTag con una mascota, Drance afirma que si la gente lo hace, debe asegurarse que su mascota está en el radio de acción de un dispositivo de la red Buscar para que pueda rastrear su ubicación.
En ambos casos, las respuestas de Apple son muy vagas y no nos hacen plantearnos el motivo por el que no podamos utilizarlas tanto en niños pequeños como en mascotas.
Las respuestas son vagas porque «poder se puede», pero no están hechos para eso. Por lo tanto, no pueden hacerse responsables si se usan para ese fin. Imaginen que alguien taguea a su hijo, este se pierde y le sucede algo. Luego demandarían a la empresa porque confiaron en seguridad y protección que el dispositivo supuestamente brindaba y no lo hacía, poniendo en peligro al niño. En USA, por la décima parte de eso, llueven las demandas.