La policĂa se ha encontrado con un nuevo problema para poder acceder a los datos de los iPhone. Lo que parecĂa un fallo de iOs 18, es en realidad una medida de seguridad para proteger a los usuarios en caso de que alguien robe nuestro iPhone y quiera acceder a sus datos.
Se han publicado en las Ăşltimas horas muchas noticias sobre un supuesto fallo que provocaba que los iPhone que estaban en manos de la policĂa a la espera de poder ser hackeados para recuperar sus datos se reiniciaran de forma «aleatoria», dificultando esta tarea. Sin embargo despuĂ©s de analizar el cĂłdigo de iOs 18.1 resulta que no es un fallo, sino una caracterĂstica que Apple ha implementado para aumentar la seguridad de nuestros telĂ©fonos. Esta nueva medida de seguridad consiste en que si despuĂ©s de un tiempo nuestro telĂ©fono no se ha desbloqueado por parte del usuario, el terminal automáticamente se reiniciará, lo cual puede parecer algo extraño, pero tiene una explicaciĂłn muy sencilla: poner las cosas más difĂciles para acceder a sus datos sin la clave de acceso.
Una vez que desbloqueamos nuestro telĂ©fono el telĂ©fono queda en modo «After First Unlock» (AFU), despuĂ©s del primer desbloqueo. El telĂ©fono asume que está en manos de su legĂtimo dueño y digamos que reduce la seguridad para acceder a los datos. Sin embargo tras un reinicio, está en modo «Before First Unlock» (BFU), antes del primer desbloqueo, lo cual lo deja prácticamente blindado ante cualquier acceso no autorizado a la espera de que su dueño lo desbloquee con su contraseña. Es decir, si alguien nos roba el telĂ©fono y no lo desbloquea durante un tiempo determinado (no se especifica pero podrĂa ser de 18 horas), el iPhone se reiniciará automáticamente quedando en modo BFU, siendo prácticamente imposible acceder a  sus datos incluso utilizando las Ăşltimas herramientas de hackeo más avanzadas. Esto es una tranquilidad para los usuarios en caso de que les roben el telĂ©fono, pero el problema con el que se encuentran las fuerzas de seguridad es que a ellas tambiĂ©n se les dificulta el acceso a telĂ©fonos que podrĂan contener datos importantes para la investigaciĂłn de delitos.