¿No hay nadie al timón en Apple? Los problemas de software son surrealistas

Recientemente han cogido cada vez más fuerza los rumores de que Apple podría estar pensando ya en la sustitución de su CEO, no por su hacer, sino más bien por petición del propio protagonista que quiere ir dando un paso al lado para asegurar el futuro de la compañía, una actitud que le honra.

Sin embargo, recientemente Apple ha dado pasos de ciego en alguna que otra situación, y si algo no faltó hasta hace unos años era liderazgo en la compañía. Los últimos problemas de software y lanzamientos fallidos nos hacen pensar que no hay nadie al timón en Apple.

Cabe destacar, que esta es una opinión personal de quien suscribe estas líneas y no tiene nada que ver ni con la línea editorial ni con la dirección de Actualidad iPhone. Sin embargo, resulta cuanto menos llamativo el hecho de que Apple esté suscitando innumerables memes en estas últimas semanas, sumándose a su vez al descontento de los usuarios al respecto de la escasa «finura» con la que Apple ha tratado a iOS 15.

El notch en macOS Monterey, la gota que colmó el vaso

El notch en el nuevo MacBook está bien rematado, como en su momento los AirPods fueron objeto de burda comedia, algo que también sucedió con el notch del iPhone para más tarde acabar siendo copiado por innumerables compañías que lo colocaban sin ton ni son pese a no tener una razón aparente para hacerlo (recordamos que la razón de ser del notch es el Face ID). En esta ocasión, sin embargo, es del todo intolerable la nula integración de este notch en macOS Monterey.

https://twitter.com/SnazzyQ/status/1453143798251339778?s=20

Independientemente de si trabajamos con una aplicación bien integrada o no, el ratón desaparece de la interfaz de usuario mientras que ocupamos el espacio del notch, es decir, virtualmente macOS no identifica que ahí no hay pantalla, y hace como si estuviéramos ante un rectángulo perfecto. Algo parecido sucede con las aplicaciones que nos muestra Quinn Nelson en los vídeos de la parte superior. Sinceramente, a mí me cuesta creer que nadie en el Apple Park de Cupertino tenga la capacidad para integrar correctamente el notch en la interfaz de usuario.

Huelga decir que estamos hablando de un portátil a un precio prohibitivo y que no contento con eso está dedicado al entorno profesional, precisamente el menos intolerante con este tipo de detalles que a la Apple de antaño, incluso a la Apple de Tim Cook, no se le hubieran pasado por alto.

Should've just been an overflow like this, albeit with a more fancy fade-off to the side — this it just a lazy demo pic.twitter.com/O1B79xo0Bt

— maxichrome (@heymaxichrome) October 28, 2021

Cualquier twittero con un poco de ganas es capaz de diseñar una alternativa interesante, de esas que luego Apple acaba copiando y presentando en la próxima WWDC como si fuera la cura del cáncer, un cáncer que ellos mismos han creado.

No es un caso aislado a nivel de software

Podríamos tener cierto nivel de tolerancia, aunque como consumidor de productos premium creo que no hay que tenerla. Pagamos un precio superior precisamente para evitar estas cuestiones que convierten a un fabricante de tecnología en uno más del montón. Pero en el supuesto que queramos aplicar el voto de confianza, nos tocaría poner la otra mejilla. Nos encontramos con que iOS 15, un sistema que has podido verme defender a capa y espada en el #ApplePodcast que hacemos en directo, y que ha sido el más criticado de los últimos años por su ausencia de novedades relevantes.

A alguien se le debería caer la cara de vergüenza en Cupertino con las chapuzas que están haciendo en iOS 15. pic.twitter.com/Cr7wUsCZOe

— Miguel Hernández (@Miguel_h91) October 26, 2021

Ausencia de novedades es perfeccionamiento de las existentes, ¿no? Nada más lejos de la realidad, iOS 15 está lleno de bugs intolerables, empezando por el erróneo funcionamiento del cálculo de % de la batería y del estado de salud de la misma, acompañándose de un sobrecalentamiento con aplicaciones poco exigentes del estilo de Spotify, errores de sensibilidad en la pantalla y la aberración que han hecho con Safari, algo que merece un artículo a parte.

Llegamos a dos conclusiones: o bien los estándares de calidad de Apple en cuanto a software han descendido notablemente, o bien hay un equipo de programación que se limita a cumplir una lista de objetivos sin alguien detrás que se preocupe por la calidad del resultado obtenido. Esto no es lo que cabe esperar de un producto autodenominado premium, si no fuera así, me cuesta entender que Apple confíe tanto en sí misma como para vendernos un trapo de dimensiones extremadamente reducidas por alrededor de 25 euros, el que en Actualidad iPhone hemos decidido bautizar como el iTrapo.

No es sólo de software

Hagamos memoria, ¿ya nadie se acuerda del AirPower? Curioso teniendo en cuenta que fueron ellos voluntariamente quienes decidieron anunciar un par de renders de un producto que permitía cargar todos nuestros iDevices a la vez, o al menos el iPhone, los AirPods y el iPhone. Sin embargo, un 29 de marzo Apple avisó mediante un comunicado de que nos deberíamos hacer a la idea de que nunca podremos pagarle cientos de euros por un cargador inalámbrico (poco más tarde lanzaron otro menos elegante que también da para una historia). En este comunicado Apple alegó que el AirPower no cumplía con los estándares de calidad de la compañía de Cupertino y por tanto el proyecto estaba muerto.

Otro ejemplo es que hace un año Apple presentaba el cargador MagSafe Duo, un cargador para el iPhone y el Apple Watch a un precio prohibitivo (150€) que quedó obsoleto en menos de doce meses, y es que la carga rápida del Apple Watch Series 7 no es compatible con este producto. No sólo eso, sino que los iPhone 13 daban problemas también con el MagSafe Duo, debido al módulo de carga no encaja correctamente y se impide su carga correcta. Una auténtica barbaridad teniendo en cuenta que los dispositivos móviles cuentan con al menos un año y medio de desarrollo, ¿no sabían que no encajaría en el futruro con el iPhone 13? Me cuesta creer que en serio puedan lanzar un cargador que al año siguiente no sería compatible con los productos de la compañía a los que está destinado.

Estos problemas son inevitables en todas las marcas, sin embargo, me cuesta creer la asiduidad con la que se producen en una marca como Apple, que presume justo de lo contrario.