¿Puede el iPad Pro sustituir al nuevo MacBook?

Apple quiere que el iPad Pro sea ya el auténtico inicio de la era Post-Pc. Un iPad con enorme potencia bruta y con las herramientas necesarias para que el tablet de Apple pueda dejar de ser un producto para consumir y empiece a serlo para producir. Su enorme pantalla, su teclado y el Apple Pencil, junto al procesador A9X y los 4GB de RAM lo sitúan en unas condiciones óptimas para poder enfrentarse a cualquier portátil del momento, pero su precio y tener iOS como sistema operativo lo limitan enormemente. ¿Puede ser el iPad Pro una alternativa real al MacBook?

Especificaciones

Es difícil establecer una comparativa entre dos dispositivos tan diferentes como el MacBook y el iPad Pro. El primero es un portátil «convencional», el segundo un tablet. Pero sí he querido al menos poder reflejar aquellos aspectos que son comparables en dos dispositivos tan diferentes pero que a priori luchan por el mismo puesto.

En esta tabla faltan aspectos como la RAM, procesador o resolución de pantalla, pero creo que son datos que no tienen demasiada relevancia en la práctica, ya que son dispositivos con sistemas operativos diferentes y por lo tanto sería como entrar en la eterna guerra entre la RAM de los dispositivos con Android y los iPhones.

Portabilidad y autonomía al máximo

Creo que no hay la menor duda de que ambos dispositivos son igualmente portables, tanto por dimensiones y peso como por autonomía. Poder salir con tu portátil o tu tablet en la mañana y olvidarte el cargador en casa es precisamente lo que muchos buscan, y ambos dispositivos cumplirán con este requisito. Además sus dimensiones son tan similares que prácticamente no notarás la diferencia entre llevar uno u otro.

Almacenamiento limitado

El iPad Pro está disponible en dos capacidades, 32GB y 128GB. Si a esto añadimos el hecho de que no es posible aumentar esa capacidad el tablet de Apple está en clara desventaja respecto al MacBook, cuyo modelo más básico cuenta con 256GB y existe otro modelo con 512GB. Es cierto que el iPad Pro es un dispositivo pensado para el almacenamiento en la nube, ya sea con iCloud o con cualquier otro servicio similar, pero no deja de ser una limitación a tener en cuenta dependiendo de tus necesidades.

Las conexiones disponibles también establecen una importante diferencia entre ambos dispositivos. El MacBook cuenta con la muy criticada única conexión USB-C, y el iPad Pro con el clásico puerto Lightning de los dispositivos iOS. A pesar de que muchos pudieran pensar que esto los deja en empate técnico la realidad es muy diferente. Existen ya adaptadores para USB-C que te ofrecen múltiples puertos o compatibilidad con conexiones USB normales, algo que no existe para el Lightning. Al MacBook podrás conectar cualquier dispositivo de almacenamiento externo, ya sea con conector USB tradicional (mediante adaptador) o con USB-C, un estándar que cada vez irá generalizándose más en los periféricos para portátiles.

Interfaz táctil y Apple Pencil

Creo que la mayor diferencia entre ambos dispositivos y quizás uno de los criterio más importantes a la hora de decidirse entre uno u otro. El iPad cuenta con una enorme pantalla táctil con resolución 2732×2048 (264ppi) mientras que el MacBook cuenta con una pantalla de similar tamaño, con una resolución menor (2304×1440 y 226ppi) pero que no es táctil. En su lugar incluye un trackpad con tecnología Force Touch que puede suplir en parte esta carencia, pero que desde luego no puede decirse que sea equivalente.

Además tenemos el Apple Pencil, un fabuloso lápiz digital con el que diseñadores seguro estarán ya soñando por las posibilidades que les ofrece junto a esa gran pantalla. En el caso del MacBook tendríamos que añadir una tableta gráfica lo cual además de suponer un aumento importante de precio, resta comodidad al necesitar un espacio de trabajo amplio y no poder utilizarse ya en cualquier lugar.

iOS vs OS X, de momento no hay discusión posible

Que nadie me entienda mal: iOS es un gran sistema operativo y las mejoras recibidas en los últimos años lo han colocado en una situación mucho más cercana a lo que puede ofrecer un sistema «convencional» como Windows o OS X. Yo mismo utilizo mi iPhone a diario en el trabajo y es una herramienta imprescindible para el día a día en mi caso, pero hay que ser realistas y lo que ofrece OS X a día de hoy está aún muy lejos de lo que ofrece iOS. Las limitaciones del sistema que Apple impone (cada vez menos) y la propia filosofía de Apple de convertir sus dispositivos iOS en aparatos para toda la familia hacen que esté en clara desventaja respecto a OS X, y que se vea aún muy lejana la posible confluencia de ambos sistemas.

Algo tan simple como escribir este artículo es prácticamente imposible en iOS. No me quiero imaginar el tiempo que me llevaría el descargar las imágenes en mi iPad Pro, retocarlas, insertarlas en la (lamentable) aplicación WordPress para iOS, colocar las etiquetas, rellenar el SEO… Seguro que muchos de vosotros me podríais dar otros ejemplos similares con otras tareas habituales para vosotros. También alguno me podría poner algún ejemplo de lo contrario, no lo dudo.

Un buen inicio pero a un precio excesivo

Quizás esta discusión no existiría si el precio del iPad Pro no fuera tan elevado. Seguramente mi argumentación se vendría abajo cuando alguien me dijera «es que el MacBook vale el doble». Pero la realidad es que si al iPad Pro le añadimos el Smart Keyboard y nos vamos a los 128GB de almacenamiento (me dejo fuera el lápiz y el 4G porque el MacBook no tiene esas opciones), su precio llega hasta los $1118, muy cercano a los $1299 que cuesta el MacBook con 256GB de almacenamiento.

Personalmente seguiré esperando hasta el Apple se decida a crear su primer híbrido, al estilo Microsoft Surface. No hubiera estado nada mal que al conectar el teclado al iPad Pro apareciera OS X El Capitán en pantalla, y no me cabe la menor duda de que por especificaciones podría haberse hecho sin problemas. Pero eso a lo mejor es para la siguiente generación, o la próxima.