Según afirman los chicos de Protocol, el fabricante de altavoces Sonos quiere recortar la cada vez más creciente competencia a la que se enfrenta por parte de Apple y Amazon, sin olvidarnos de Google (aunque este parece que juega en otra liga) y está estudiando nuevas formas de optimizar el audio utilizando señales inalámbricas.
Protocol afirma que Sonos ha presentado una patente que adopta un enfoque diferente al del HomePod original (el modelo que llegó al mercado en 2018) para optimizar la calidad del sonido. En la patente presentada por Sonos, titulada Sistemas y métodos para la detección de estado a través de radios inalámbricas, el fabricante afirma que ciertas señales Wi-Fi pueden verse «afectadas negativamente por el agua».
Esta patente se puede utiliza para la «detección o ausencia de un humano dadas sus propiedades físicas» (que somos esencialmente agua). De esta forma, si el altavoz detecta a un humano, podría automáticamente «ajustar las características de audio» en función de su ubicación, de forma que este siempre disfrutaremos de la mejor calidad de sonido.
El HomePod que Apple lanzó al mercado en 2018, utiliza los micrófonos incorporados para escuchar el entorno de la habitación donde se encuentra y ajustar la reproducción, de forma que si se coloca cerca de una pared, ajustará la calidad de sonido para repartido el sonido por toda la habitación.
Como cualquier otra solicitud de patente de las grandes empresas, su registro no significa que estén a punto de llegar al mercado, ya que en ocasiones, puede tratarse únicamente de una idea que, en ese momento, no hay forma de probar.
Sin embargo, parece que Sonos ya ha probado esta tecnología en sus laboratorios, en lugar de tener la idea y registrarla, por lo que es probable que la próxima generación de la gama Sonos, ya incluya esta nueva funcionalidad que sin duda mejorará la calidad del sonido.
