Es uno de los más bellos y peculiares teléfonos de la historia. Trajo la revolución al diseño de la telefonía, desde ese día, era necesario que los smartphone no sólo fueran grandes, sino que también fueran bonitos. El iPhone 4 estaba compuesto de materiales de primerísima calidad, perfectamente ensamblados, dando una impresión de que no sólo teníamos un teléfono, teníamos una joya, un accesorio. Fue el 7 de junio de 2010 cuando Steve Jobs presentó el iPhone 4 durante la WWDC, una de sus grandes presentaciones (si es que tuvo alguna mala), un dispositivo realmente adelantado a la época en lo que a términos de diseño se refiere.
Al hablar del iPhone 4, es fácil acordarse de los problemas de antena y otros bugs. Por no mencionar, que su hermano gemelo, el iPhone 4s, lo superaba notablemente en cuanto a hardware, de hecho, no es raro ver aún algún que otro iPhone 4s totalmente activo. Con la llegada del iPhone 4, Steve Jobs presentó algo más que un teléfono, presentó una seña de identidad, un carácter. Desde entonces, al menos el frontal del iPhone no ha cambiado absolutamente nada, las esquinas redondeadas habían llegado para quedarse, y ahí siguen todavía. Os dejamos el corto de la presentación del iPhone 4, de las manos del gurú de Cupertino, Steve Jobs.
La realidad, es que tener conocimientos de inglés suficientes como para entender al dedillo la implicación de Steve Jobs con la presentación del dispositivo. Cada presentación de Apple en la era Steve Jobs parecía cuanto menos un mito, y la del iPhone 4 no iba a ser menos. Como detalle, esta presentación estaba repleta de desarrolladores, en otras ocasiones, las presentaciones se hacen sólo ante prensa y empleados de Apple. El iPhone 4 marcó un claro antes y después en el diseño de la telefonía, de hecho, es un modelo que todos echamos de menos.
¿Qué hay de nuevo? iPhone 4
El iPhone 4 fue lanzado a la par del iPad, el mismo año. Fue entonces, el establecimiento de la hermandad entre dispositivos iOS, la integración entre todos era la clave, y hoy día se ha llevado al extremo. Pero no sólo eso, a nivel de software, también nos encontramos con la presentación de Face Time, el sistema de llamadas y video-llamadas VoIP de Apple, disponible entre dispositivos de la compañía de Cupertino. Asimismo, la cámara recibió un buen lavado de cara, los 5 Mpx acompañarían bastante tiempo a Apple, y el flash LED llegaba para quedarse. La cámara delantera, sin embargo, poseía calidad VGA.
Llegaron también las pantallas retina, una resolución con cuatro veces más píxeles que el iPhone 3Gs, que se dice pronto, una pantalla que enamoró al mercado mucho tiempo, que ahora siguen manteniendo, a pesar de que algunos piden su paso al OLED a viva voz. Sin embargo, algo no cambiaba, Apple no pretendía abandonar las 3,5 pulgadas, Steve Jobs avisó de que era el tamaño óptimo para utilizar un dispositivo así, aunque antes de dejarnos, presentó un dispositivo de cuatro pulgadas. No sabemos qué habría opinado del iPhone 6 de 4,7 pulgadas.
Al mismo tiempo, comenzaba la carrera por la delgadez en Apple, un 24 por ciento más delgado que el 3Gs. Sin embargo, el procesador y la memoria RAM no se mostraron a la altura de la pantalla retina, creando el clásico mito de la corta duración de las baterías en los iPhone, fenómeno estupendamente solventado en el futuro. Está claro que el iPhone 4 ha sido una de las presentaciones más míticas y relevantes de la era Apple en telefonía ¿Tuviste un iPhone 4 o todavía lo tienes? Cuéntanos tu experiencia con él, y sobretodo, si te mereció la pena su compra.
El iPhone 4 fue el último iPhone que tuve, por diversos motivos. Pero guardo un muy buen recuerdo de él: lo compré al poco de salir con una oferta de Vodafone que por aquélla época no estaba mal, y lo aguanté hasta hará cosa de tres años o poco menos, cuando ya estaba más que superado por sus hermanos mayores. Mi teléfono anterior fue un iPhone 2G americano que me enamoró en cuanto lo vi anunciado de rasquis en un telediario, en mano de Steve Jobs, y las cosas quisieron que me lo pudieran traer unos familiares que estaban de turisteo por los USA; antes que eso, varios Motorola que no eran smartphones pero tenían su cámara de fotos y demás pijaditas, y antes que esos varios Alcatochos tontos que sólo servían para llamar y enviar SMS XDDD
¡Me voy por las ramas! Sufrí el antennagate (haberlo habíalo, aunque no tan exagerado como algunos lo pintaban), fui de los que recibieron una funda gratis por parte de Apple por culpa de ese problema (un bumper original, que le iba como un guante) lo tuve con y sin jailbreak, me acompañó en viajes largos y desplazamientos diarios como un campeón y creo que fue esto último lo que lo mató: no sé si fue defecto del modelo en sí, pero dos trayectos diarios de hora y pico cada uno en Cercanías de RENFE con zonas de túneles y cobertura yendo y viniendo constantemente, literalmente lo frieron. Empezó con pantallazos blancos y terminó por no iniciarse en absoluto. En la Apple Store me vendieron uno de sustitución igual porque ya no estaba en garantía, no salió barata la broma pero me pareció buena idea… craso error: siete u ocho meses más tarde, cuando ya estaba fuera de la garantía de los que Apple vende como sustitución, le pasó exactamente lo mismo y terminé asumiendo que era cosa del efecto tren matador y sus caídas constantes de cobertura.
Cuando ocurrió yo ya no estaba yo por la labor de comprar otro iPhone. No ayudó que era (y soy) fan del jailbreak y sus posibilidades porque venía de ese iPhone 2G americano que lo necesitaba para funcionar en España, y como cada vez era más difícil conseguir el jailbreak y Apple cada vez lanzaba las versiones de iOS menos espaciadas en el tiempo, finalmente me convencieron para que me pasara «a la otra acera», esa del androide verde (aunque lo hice bien y fui a por un Nexus 5 que aún me dura), y ahí se terminó mi experiencia Apple. Echo de menos la belleza del modelo, cositas y detalles de iOS que Android no tiene… pero no echo de menos su conector propietario ni la dependencia de iTunes para según qué cosas ni la cerrazón del sistema operativo. Es lo que hay, no voy a iniciar ninguna campaña ni criticar ácidamente, cada cual monta sus cacharros como quiere y Apple lo hace así, y tampoco se esconden así que al que no le guste como digo siempre, hay miles de otras opciones.
En fin, supongo que soy una de esas personas que han estado en los dos bandos «de la guerra» y no le pueden venir con batallitas interesadas de ninguno de los dos bandos. El iPhone 4 lo guardaré siempre en el recuerdo, igual que cuando jubile el Nexus 5 que ahora tengo. Lo que vendrá después, ya se verá 🙂
Muchas gracias por aportar tu información y experiencia.
Completamente de acuerdo con el artículo. El
iPhone 4 marco un mito en cuanto el diseño de teléfonos se refiere, elegante, delgado, acabados perfectos y una pantalla superior al de la competencia en su momento fue lo que enamoró a mucha gente (me incluyo) y tene por objeto de deseo este bonito teléfono. Desde ese entonces uso iPhone pero desde la partida del gran Steve hay que ser sinceros en que Apple se ha quedado corto en cuando a innovación, el iPhone sigue falto de la misma. Ojalá en un futuro no muy lejano Apple vuelva a tener aunque sea un 50% de innovación de la que tuvo con Steve y nos sigan mostrando productos de verdad Revolucionarios como lo fue este iPhone.
Me alegra que te guste Elvin