El sensor biométrico de huellas dactilares de Apple, el Touch ID, está siendo el elemento de la discordia en relación al iPhone 8. Se sabe que este terminal casi no tendrá marcos, es decir, que la mayoría del panel del terminal lo conformaría una pantalla, apurando los bordes para así llegar a disponer gran espacio para el usuario. Esto implicaría que el Touch ID no tendría espacio en la parte delantera como botón físico, pero las últimas patentes apuntan a que Apple estaría trabajando en un sensor Touch ID basado en una tecnología ultrasónica, es decir, que el sensor no tendría que estar en contacto con la huella, sino que la información se transmitiría por ultrasonidos.
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La pantente de la discordia: Touch ID por ultrasonidos
Está claro que Apple pretende sacar toda su artillería pesada para celebrar el décimo aniversario del iPhone. Una de las tecnologías que llevaría tiempo probando estaría basada en la tecnología de Privaris y los algoritmos de AuthenTech, una empresa de seguridad biométrica adquirida por Apple hace años por valor de 350 millones de dólares.
Este nuevo sistema llevaría tecnología avanzada que permitiría desbloquear el terminal mediante ultrasonido, en vez del actual Touch ID que emplea tecnología capacitativa. Esto permitiría que el sensor estuviera incorporado en el interior de la pantalla OLED que el supuesto iPhone 8 llevaría.
El desarrollo de esta tecnología está frenando los avances de los prototipos debido a que incorporar esta tecnología en una pantalla y que funcione a la perfección como lo hace el actual Touch ID es tarea complicada si se quiere llegar a septiembre y lograr que la producción esté preparada para las fechas de compras navideñas.
Si no llega a tiempo… ¿que opciones le quedan a Apple?
Esta pregunta se la han planteado muchos analistas y nosotros, los propios usuarios. ¿Queremos un iPhone sin Touch ID? ¿Compraríamos un iPhone con Touch ID en la parte trasera? Un analista llamado Tomothy Arcuri ha elaborado un plan de acción con tres posibles actuaciones por parte de Apple, los cuales compartimos al cien por cien:
- No quedaría otro remedio que aceptar que Apple no ha sido capaz de momento de incluir el Touch ID bajo el panel OLED del iPhone 8 y confiar en que haya desarrollado otros métodos de desbloqueo seguros como el desbloqueo facial
- En esta segunda opción, se plantea que la gran manzana llevara tanto el botón Home como el sensor biométrico a la parte trasera. Nosotros creemos que sería un error por parte de Apple tanto por usabilidad como por estética.
- Por último, Apple podría retrasar la producción del iPhone 8 dándose así más tiempo de desarrollar la inclusión del sensor debajo de la pantalla OLED. Eso sí, las fechas de presentación se mantendrían y se alargaría la fecha de venta, teniendo suficientes terminales a la venta en las fechas navideñas.
Ahora solo queda esperar y confiar en que Apple haga lo mejor para nosotros, los usuarios.
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