Mucho se habló del tema en su día, pero por si no lo conoces, te hacemos un breve resumen: Irlanda ofreció a Apple, de mutuo acuerdo, un sistema de impuestos irrisorios para poder atraer capital como beneficio a Irlanda, y para poder distribuir por Europa cómo beneficio a Apple.
Este fraude de ley que no gustó nada a la Unión Europea y al conjunto de países que la componen, derivó en una serie de sanciones. Tras el veredicto de más autoridades judiciales competentes, Apple ha decidido emprender el pago de los impuestos evadidos esta semana.
Esta información remitía Financial Times esta misma madrugada, por fin el asunto que se viene arrastrando desde el año 2016 parece tener un final, muy a pesar de que Apple mostró su desacuerdo con la decisión final tomada por los organismos internacionales. De hecho, Tim Cook advirtió de que seguirían batallando judicialmente contra la resolución. Por contrario, esta semana se ha confirmado que Apple va a proceder al abono de esos 13.000 millones de euros que podría haber evadido a través del irrisorio impuesto que Irlanda le facilitó para realizar sus actividades dentro del territorio europeo. Se dice pronto, pero esa ingente cantidad de dinero se podría haber dedicado efectivamente a política social.
Es un paso importante de cara a estabilizar la situación a nivel de impuestos que Apple mantiene en Europa, además, debido a este movimiento, la compañía de Cupertino ha anunciado que movilizará su sede a la Isla de Jersey. En definitiva, esto de Hacienda por lo general funciona mejor que cualquier otro tipo de organismo, el dinero llama al dinero, por lo que no nos sorprende que haya sucedido esto con el asunto de Irlanda, la pregunta ahora es… ¿caerán más grandes compañías? Recordamos que no sólo Apple se ha beneficiado de este desafortunado movimiento.
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