Que Apple Pay está revolucionando en muchos ámbitos el mercado de los pagos electrónicos y físicos es evidente, en Estados Unidos sobre todo ha crecido a nivel espectacular, mientras tanto y lamentablemente, en otros países como España está sumamente estancado desde su lanzamiento a dos únicas entidades de crédito: Banco Santander y Carrefour Pass, aunque lo último que se pierde es la esperanza, y seguimos esperando que expanda su oferta. Sin embargo, lo que no podíamos esperar es que a estas alturas de la película entrara en juego el tema de las patentes y de cómo Apple podría estar aprovechándose de ellas para enriquecerse… ¿estamos ante el enésimo intento de sangrar a la compañía de Cupertino?
Al parecer, el CEO de Universal Secure Registry, Kenneth Weiss, apunta a que sus invenciones y desarrollos son la parte principal en la que Apple Pay basa su funcionamiento. De hecho, en sus declaraciones apunta a tres partes concretas de la utilización que afectan a sus patentes, ya que Kenneth Weiss cuenta con trece patentes en cuanto a los sistemas de autenticación que usan los teléfonos inteligentes, así como la identificación biométrica en materia de huella dactilar y la generación de tokens únicos para llevar a cabo transacciones financieras seguras.
Sin embargo, teniendo en cuenta estas tres clarificaciones del desarrollador, que apunta a que Apple conoce esta tecnología desde el año 2010, es bastante evidente que se tratan términos genéricos sin los cuales sería imposible totalmente realizar un pago de estas características, no sólo a través de Apple Pay, sino a través de cualquier sistema similar. Así pues, Kenneth Weiss ha anunciado a The New York Times que va a impulsar una demanda con la intención de solicitar los royalties correspondientes a la utilización de esta tecnología patentada. No sabemos dónde acabará esta demanda, imaginamos que en la planta más alta del típico edificio donde estén los abogados de Apple, a los que nunca se les acaba el trabajo.