Ayer martes, Apple se adjudicó una patente, titulada «Stylus inteligente» en la que aparecía un dispositivo que bien podría ser el Apple Pencil, un accesorio para uno de los iPad Pro que Apple presentó en septiembre de 2015 o el pasado mes de marzo. Entre las lógicas diferencias, destacan nuevos sensores y cabezales intercambiables, lo que podrían hacer del stylus (arg! – Steve Jobs) un dispositivo más potente y preciso de lo que lo es en la actualidad.
El Apple Pencil actual usa un sensor de presión y unos sensores para determinar la fuerza y la inclinación que estamos aplicando. Además de esto, los cabezales intercambiables descritos en esta patente permitirían dibujar y escribir con texturas diferentes. Según la patente, cada uno de estos cabezales incluiría códigos exclusivos que permitirían al Apple Pencil reconocer cuál se ha usado en cada momento para cambiar la salida del dispositivo para que coincidan las características.
¿Un Apple Pencil con Touch ID?
El dispositivo que presenta esta patente tiene más sensores que el Apple Pencil que se presentó en septiembre, lo que le permitiría ser más preciso leyendo la presión, posición y orientación. Además, añade un punto de seguridad: un Touch ID. Para poder leer la huella y mantener el tamaño del stylus, sería el iPad Pro el que leería la información haciendo uso del Bluetooth.
La patente fue presentada en 2011, pero no se la habían concedido a Apple hasta ayer. Si no nos fijamos en el dibujo de la patente, podríamos pensar que no tiene sentido cambiar los cabezales para dibujar con diferentes texturas, puesto que esto se puede hacer vía software, pero en el dibujo vemos que hay un cabezal para un sensor táctil surround, un cabezal con una cámara, un sensor de rotación y uno que emite luz.
El Apple Pencil es un stylus inteligente que no podemos decir que sea muy asequible, por lo que puede tener sentido ponerle un Touch ID que impida que alguien pueda usarlo si lo perdemos. En cualquier caso, estamos hablando de una patente y no todas llegan a ver la luz. Como siempre, para salir de dudas tendremos que esperar varios meses o incluso años.