Al final parece que Donald Trump se ha salido con la suya y conseguirá que parte de la producción de los componentes del iPhone sean fabricados en Estados Unidos. Uno de los argumentos que esgrimió el actualmente presidente durante su campaña electoral era que obligaría a Apple a que fabricara la mayoría de sus productos en el país.
Aunque esta decisión de momento está muy lejos de producirse, parece que Foxconn es el primero que mueve ficha y probablemente esta semana anuncie su planes futuro para abrir la primera fábrica de pantallas en territorio americano.
Según informe The Wall Street Journal, Foxconn tiene planeado organizar un evento en Washington DC esta misma semana en los que anunciará los planes de inversión en el país, planes que pasarían por abrir una fábrica de pantallas en Wisconsin y probablemente en Detroit. Si este informe se confirma, se realizará varios días después del evento que organizó el presidente de los Estados Unidos mostrando los productos «Made in America».
A pesar de ser uno de los grandes, por no decir el más grande, proveedor de Apple y de muchas otras empresas, Foxconn no establecería la fábrica en Wisconsin para producir componentes para Apple, sino que se fabricarán paneles de televisión. La creación de esta fábrica tendría un coste para la firma china de unos 7.000 millones de euros y daría trabajo a miles de personas.
Si finamente se confirma la creación de una segunda fábrica en el país, concretamente en Detroit, esta si que podría estar destinada a la creación de componentes y tal vez al ensamblado de productos de Apple en el país. Foxconn buscaría la ayuda de Apple para sufragar los 7.000 millones de dólares que tendría el coste de esta segunda fábrica destinada exclusivamente a fabricar productos de Apple en Estados Unidos.