Google hizo una demostración sobre su nuevo modelo de Inteligencia Artificial, Gemini, que nos dejó a muchos boquiabiertos, pero resulta que hizo trampas para engañarnos intencionadamente.
La carrera por la Inteligencia Artificial (IA) ha comenzado, y OpenAI ha dejado a las grandes compañías en fuera de juego. Apple sigue a lo suyo, sin prisas pero parece que trabajando en su propio modelo que podríamos empezar a ver a partir del próximo iPhone 16. Pero Google sí parece que tiene más prisa, y ha presentado lo que puede hacer Gemini, su nuevo modelo de IA, con un vídeo que es impresionante, o mejor dicho, que lo sería si fuese cierto, porque ha hecho trampas.
En un vídeo que en menos de 48 horas ya tiene casi dos millones de reproducciones, podemos ver cómo funciona Gemini de una forma que hasta ahora nunca habíamos visto. Mediante imágenes en vivo y voz, la IA de Google nos responde a nuestras preguntas de voz reconociendo en todo momento lo que ocurre en las imágenes, a la vez que ocurre, sin tiempos de espera. Si perdéis unos minutos viendo el vídeo os vais a quedar impresionados, sin ninguna duda.
Pero resulta que no es así como funciona Gemini. El modelo de Google no reconoce las imágenes del vídeo que vemos nosotros, sino que lo que realmente reconoce son imágenes fijas y preguntas escritas, nada que ver con lo que se muestra en el vídeo. Por ejemplo, para que entendáis bien lo que quiero decir, en el minuto 4:27 podemos ver cómo se presentan tres dibujos (Sol, Saturno y la Tierra) y se le pregunta si es el orden correcto. La respuesta de Gemini es que no es correcto, y añade el orden real. Pero no es así como ocurren las cosas, lo que ve Gemini es una foto de los tres astros y una pregunta escrita: «¿Es este el orden correcto? Considera la distancia al sol y explica tu razonamiento».
Todo el vídeo de Google es un montaje que nada tiene que ver con el funcionamiento real de Gemini. Es cierto que la IA de Google nos da las respuestas que vemos en el vídeo, y que se usan las imágenes que vemos en el mismo, pero el «cómo» es muy importante, y aquí Google nos ha engañado. Mostrarnos el funcionamiento real del modelo hubiera sido lo correcto, pero sin duda no hubiera sido tan impactante, ¿verdad?.