Que el desastre acontecido con los Galaxy Note 7 iba a acarrear consecuencias negativas para la compañía surcoreana Samsung, estaba cantado. Sin embargo, los efectos están siendo especialmente importantes, e incluso podrían marcar una tendencia si la empresa no es capaz de recuperar la confianza que ha perdido por parte de un amplio sector de sus usuarios.
La firma de investigación de mercado IDC ha elaborado un nuevo informe que muestra la participación que los diferentes fabricantes de teléfonos inteligentes del mundo tienen en este sector. Y el resultado no es favorable a Samsung. Según los datos suministrados por IDC, Samsung ha reducido su cuota de participación en el mercado mundial de los smartphones hasta el 20% durante el tercer trimestre de 2016, lo que supone una caída del 3,3% respecto del mismo período del año anterior. En estos momentos, la cuota de mercado de Samsung es la más baja desde desde hace casi dos años, cuando contaba con un 19,9% en el cuarto trimestre de 2014.
Samsung pierde más del 3% de cuota de mercado
De acuerdo con los datos aportados por el informe de IDC, Samsung ha enviado 72,5 millones de teléfonos inteligentes durante el tercer trimestre de 2016. Esto supone una caída de los envíos del 13,5% si comparamos la cifra con los cerca de 83,8 millones de teléfonos inteligentes que fueron enviados a lo largo del mismo período del año inmediatamente anterior.
Esta notable disminución de las ventas se atribuye al desastroso lanzamiento del Samsung Galaxy Note 7 y a su posterior retirada por las causas que ya todos conocemos. Sin embargo, no es este el único motivo dado que la retirada del Note 7 se produjo a comienzos de septiembre, por lo que el impacto de este movimiento en las cifras relativas al tercer trimestre de 2016 ha sido limitado ya que el informe alcanza hasta el día 26 de septiembre. De hecho, algunos analistas ya pronostican que las ventas y la cuota de mercado de Samsung en el mercado mundial de los teléfonos inteligentes se verán aún más afectadas durante el cuarto trimestre de 2016 dado que la retirada e interrupción del Samsung Galaxy Note 7 afectará de lleno a todo el período.
Apple mantiene su segunda posición, aunque también sus ventas se ven mermadas
El gran competidor de Samsung, Apple, ha finalizado el tercer trimestre de 2016 en segunda posición, aún por detrás de la surcoreana, como ya es habitual, con 45,5 millones de dispositivos iPhone vendidos. También Apple ha visto reducidas sus ventas pues esa cifra supone una caída del 5,3% frente a los 48 millones de teléfonos que vendió en el mismo período del año pasado. De esta forma, la cuota de mercado mundial de Apple alcanza el 12,5%, por debajo del 13,4% del tercer trimestre de 2015.
Se acerca la época de compras navideñas y el recuerdo del Galaxy Note 7 podría perjudicar aún más a Samsung, a la vez que Apple podría verse beneficiada de ello:
La demanda esperada para el iPhone 7 Plus ha sido superior a la oferta, que debe ser aliviado a través del cuarto trimestre, ayudado por las nuevas características tales como la resistencia al agua, un procesamiento más rápido, óptica mejorada y mayor capacidad de almacenamiento. Una nueva opción de color «negro brillante» también ha demostrado ser popular entre muchos operadores y socios minoristas siguen enviando órdenes del nuevo dispositivo. IDC cree que el iPhone podría ser testigo de un mayor éxito que vendrá el próximo trimestre como es lógico beneficiándose de la sustitución del Note 7 de principios de este mes
Los fabricantes chinos completan el mapa
Los fabricantes de teléfonos inteligentes chinos Huawei, OPPO y Vivo completan el ranking de los cinco mayores vendedores de smartphones durante el tercer trimestre de 2016 con un 9,3%, 7% y 5,8% de cuota de mercado respectivamente. En concreto, Huawei acorta distancias respecto a Apple de 33,6 millones de teléfonos vendidos en el trimestre, lo que representa un crecimiento anual del 23%.
En general, todos se enfrentan a un mercado saturado que sólo ha crecido en un 1% durante este último trimestre con unas ventas totales de 359,3 millones de unidades. Que los fabricantes chinos puedan llegar a superar a Samsung y Apple dependerá en gran medida de su capacidad para entrar en los mercados de Estados Unidos y Europa, donde su presencia es actualmente limitado.