El iPhone X trajo una novedad nunca antes vista en un teléfono de la compañía de Cupertino, un sistema de baterías en «L» que prometían dotar a este teléfono de una capacidad y autonomía interesantes. Parece que la miniaturización en lo que a hardware interior está surtiendo sus frutos, no podía ser para menos.
Sin embrago, por ahora nos encontrábamos ante dos baterías interconectadas, y no ante una única batería con esa forma. Sabemos que Apple es capaz de hacerse con baterías con diseños peculiares para aprovechar hasta el mínimo espacio (como ya hizo con el MacBook Air), así es como según las últimas filtraciones Apple está trabajando en adquirir baterías con formas de «L» para las nuevas generaciones de dispositivos que lancen al mercado.
Según The Investor, la compañía de Cupertino parece haber hecho tratos con empresa del sur de Corea con la intención de desarrollar estas baterías, que serán incluidas en todos los teléfonos de la compañía durante el año 2018. Estas baterías podrían ser más eficientes y tener más autonomía, pero hay un punto negativo claro, va a ser mucho más difícil de sustituir y de adquirir recambios, puesto que no son materiales fácilmente imitables, más en un producto donde cada milímetro cuenta, literalmente.
Estas baterías a las que nos referimos serían fabricadas por LG, misma compañía a la que Apple se va a encomendar para sus pantallas OLED de los futuros teléfonos de la compañía, o al menos los que sí incluyan esta tecnología. Esperemos que de una vez por todas los iPhone vuelvan a ser un referente en lo que a autonomía se refiere, sea con baterías en forma de «L» o mediante otro tipo de mejoras de software, la popularidad de Apple en estos términos no es la que cabe esperar de una compañía de este tamaño.