Trump no descansa en su empeño de tener el control absoluto en todos los estamentos de su país. Y tiene una china metida en el zapato con la forma de una manzana mordida. Con la excusa de la seguridad nacional por encima de todo, quiere que sus estamentos policiales puedan vigilarlo todo, incluso la información privada de los iPhones.
Apple no está por la labor, y antepone el derecho a la protección de los datos de sus usuarios por encima de todo. Y por encima del presidente de los Estados Unidos, si hace falta. Y ante la falta de entendimiento, entra la fuerza bruta. Un fiscal de Nueva York se ha emperrado en hackear sí o sí los iPhones para poder extraer toda la información en un momento dado que lo necesite la justicia. ¿Lo conseguirán?
El fiscal del distrito de Manhattan, Cy Vance Jr., ha construido un laboratorio forense de alta tecnología que ha costado unos 10 millones de dólares con el propósito de poder descifrar el acceso a cualquier iPhone bloqueado, según un informe de Fast Company.
Según este artículo, el laboratorio está equipado con un hardware «alucinante» y un equipo de expertos en tecnología, muchos de los cuales son exmilitares. Incluso el laboratorio está protegido por radiofrecuencia para evitar el posible borrado de forma remota mientras se realiza una investigación.
Cuentan con un superordenador que genera 26 millones de códigos de acceso aleatorios por segundo, y un robot que puede desmontar chips de memoria sin usar calor, entre otros artilugios.
Vance asegura que el 82 por ciento de los smartphones que entran en el laboratorio para ser investigados están bloqueados, y su laboratorio de delitos informáticos puede descifrar «aproximadamente» la mitad. Hay que remarcar que es esta afirmación se refiere a smartphones en general. Lo más probable es que esa «mitad» de dispositivos infranqueables sean iPhones. En ningún momento del informe ha dicho que su laboratorio haya podido desbloquear un móvil de Apple. Vaya, vaya.
Será tan así?
Por lo que veo, iOS parece infalible…
Igual tengo mis dudas.