Las empresas tecnológicas tratan de ser punteras en aquello que les proporciona más beneficio. La gran mayoría de usuarios, a día de hoy, tienen diferentes gustos. Es por eso que grandes compañías como Apple o Samsung tienen que expandir su abanico de productos para intentar captar el mayor número de usuarios dentro del espectro en el que se mueven.
Una de las cosas que miramos a la hora de comprar un producto es la pantalla. En el caso del iPhone X y XS tienen una muesca a la que se bautizó como ‘notch’. Uno de los proveedores de Apple, AMS, ha anunciado un componente que podría hacer que el notch se hiciera más pequeño en los iPhone 2019 e incluso pudiera llegar a desaparecer.
Los rumores podrían ser ciertos: el iPhone 2019 tendría un ‘notch’ pequeño
Desde hace unos meses se están publicando informes sobre los posibles iPhone 2019. Estos terminales que se presentarían en septiembre tendrían un notch más pequeño que en el iPhone X y XS. El principal problema por el que actualmente tienen esa dimensión es porque albergan el complejo TrueDepth capaz de desbloquear el terminal mediante Face ID, entre otras muchas funciones.
Un proveedor de Apple, AMS, ha presentado un componente que podría permitir a las compañías «eliminar los marcos» de sus dispositivos. En la presentación del componente se hizo una reflexión sobre la importancia que actualmente las empresas dan a la relación pantalla-marco. Y es verdad. Si el notch del iPhone XS fuera más grande, quizá muchos preferirían otro producto.
El TCS3701 permite a los diseñadores de teléfonos llevar esta tendencia a un nuevo nivel, eliminando potencialmente el marco. Esto solo es posible porque el TCS3701 puede operar detrás de una pantalla OLED, un avance que se logra gracias a la extraordinaria sensibilidad del dispositivo y la implementación de sofisticados algoritmos de medición para compensar la distorsión óptica causada por la pantalla OLED
El componente al que han llamado TCS3701 es un sensor de proximidad IR que funcionaría debajo de la pantalla OLED. Es decir, el sensor se introduce debajo de la propia pantalla del iPhone, por lo que se podría eliminar el notch (que es marco) para sustituir ese espacio por pantalla. El director ejecutivo de AMS asegura que han creado algoritmos de medición avanzados capaces de eliminar las interferencias del brillo ambiental que pudieran entrar mediante la pantalla OLED.
Aunque no se sabe con certeza, se cree que casi la mitad de la compra de componentes de AMS recae sobre Apple. Por lo tanto, es muy probable que este nuevo sensor pueda ser comprado por la gran manzana en masa para diseñar si no son los iPhone 2019, quizá lo los del 2020, y diríamos adiós al mítico notch que Apple creó con el iPhone X.